* Lavazza no está afiliada, avalada ni patrocinada por Nespresso
**Nescafè®, Dolce Gusto® y Melody I son marcas comerciales de terceros no relacionadas con Luigi Lavazza S.p.A.
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Los secretos para preparar un delicioso sorbete con un toque de café. Disfruta de las recetas de Lavazza con quien más te apetezca.
El sorbete de café es una de las variantes más queridas del sorbete clásico, el famoso y entrañable postre italiano.
Este postre frío se considera el antepasado del helado de fruta.
Fresco y delicioso es el postre perfecto para cualquier temporada.
Sus orígenes se remontan a la antigüedad, cuando el emperador Nerón llevaba hielo de los Apeninos a Roma. En Sicilia, los árabes aprendieron a utilizar la nieve del Etna mezclada con sal marina para mantener baja la temperatura del sorbete durante su elaboración.
La invención del sorbete se remonta a un pescador de Aci Trezza, Sicilia, que creó el prototipo de heladería empleando una mezcla de sal marina y nieve.
Para preparar este delicioso postre, sugerimos que se utilice Delizioso. Un espresso inconfundible que se elabora con granos de Arábica de Brasil, Asia y Centro y Sudamérica con notas aromáticas suaves y dulces.
330 ml de agua
180 g de espresso (6 espressos ristretto)
120 g de azúcar
150 g de nata líquida
6 cucharaditas de espresso y 13 cucharaditas de amaretto
1. Prepara un espresso.
2. Derrite el azúcar en el espresso y añade el agua: mezcla bien.
3. A continuación, añade la nata líquida y remueve hasta que esté bien mezclado.
4. Pon todo en un recipiente de plástico y déjalo en el congelador durante 4-5 horas. (Cuanta más cantidad haya, más tiempo se debe dejar en el congelador).
5. Una vez frío, rómpelo en trozos del tamaño de un dado.
Añade las cucharaditas de café espresso y amaretto y mezcla todo con la batidora manual. ¡El sorbete de café está listo para servir!